Monika

Si hoy tengo estabilidad, tranquilidad, bienestar, si me siento segura, encontrada con un rumbo, es gracias a que encontré el budismo.

Un día me pregunté cuál sería mi karma por tener dificultades, y al preguntar al Google salía que el IB tenía un curso de transformar el karma.

Así que al ser este curso en julio y aún era abril 2018, pude hacer el retiro de Chenrezig en línea.

Quedé profundamente estremecida, agradecida y encontré un refugio en la fuente de compasión de Chenrezig. Sentí una enorme gratitud y admiración hacia las monjas Dharmadatta, supe que quería profundizar en el budismo.

Desde esa fecha gracias al IB he ido creciendo, aprendiendo, practicando y transformando.

Sigo en el camino, con mucho que aprender y transformar, pero siento que piso en tierra firme, ya no necesito viajar a otros países o cambiar de ciudades para encontrarme como solía hacer.

El hecho de tener un refugio confiable como el amor bondadoso que veo en Buda, el amor bondadoso que puedo aprender del Dharma (las enseñanzas de Buda) y poder practicar este amor bondadoso en la sangha o comunidad, hace que me sienta encontrada, con un camino.
Antes de encontrar el budismo no seguía ninguna religión, me crié sin religión.

Para mí ha sido muy importante encontrar un refugio confiable, ya que mi inquietud me hacía buscar en libros que quizás no me ayudaban a profundizar en mí como lo ha hecho el budismo. También tendía a cambiar de ciudad o de país para buscar la verdad y mi interior.
Creía que era necesario ir a Asia para encontrar lo espiritual y mi interior.

El budismo es lo que me ha dado tranquilidad y por supuesto estabilidad emocional.

Ahora tengo las herramientas gracias a que encontré el budismo para mirarme, buscarme y transformar aquello que no es beneficioso por algo benéfico para mí y los demás.

Las herramientas de las enseñanzas de los cursos del IB me hacen entender la vida con una perspectiva más amplia y comprender conceptos de karma, impermanencia, interdependencia y vacuidad que a mí me dan sentido a entender el ciclo de vida-muerte.

La meditación me ha dado la experiencia de la teoría budista, experimentando compasión, vacuidad… La ética budista es mi timón para ir en el rumbo correcto.

Gracias, por tanto, no hay palabras de agradecimiento para tan valioso tesoro.

Biografía:
No soy mi pasado, me siento parte de todo y todos los seres.